En la noche del viernes, 1 de abril de 2022, después de la pausa “COVID”, asistí a Microtheater Miami con mi esposo y un compañero de su trabajo con su novia; la cual no habla español, comenzando esta velada con una situación digna de conflicto teatral. Me sorprendí gratamente porque el lugar estaba lleno de artistas, amigos, bohemios, muchos jóvenes y dos niños. Esto fue muy esperanzador para el arte escénico de Miami, ¡sonreí grande!.
El reto para los creadores de esta temporada es presentar obras musicales. Existen nueve en taquilla que estarán hasta el 23 de abril, pero anoche solo vimos cinco de ellas. A continuación, les comentaré de lo que más me gustó:
“La Freddy de Cuba” en el contenedor #1, esta micro-obra “nos invita a viajar en el tiempo hasta el Cabaré del Hotel Capri, en La Cuba de 1959, para contarnos cómo La Freddy pasó de ser sirvienta para convertirse en una gran estrella”. El escritor y director, Yesler de la Cruz, vino con todo en esta obra; la cual, de micro, solo tiene la duración porque el lugar se agiganta con el uso tan creativo del espacio escénico. No soy un fanático de los monólogos porque estos suelen tornarse lentos. Pero anoche, ví tres unipersonales que me demostraron que no es el ritmo lo mas lo importante, sino la verdad actoral. La voz y corporeolidad de Gretel Bareiro, fue primaveral y me hubiera gustado paralizar el tiempo para pintarla, ya que cada escena se tornaba en casi que un ejercicio cinematográfico. Esta pieza logró algo difícil de encontrar: nos educa, entretiene e inspira.
Nunca había visto una propuesta queer de Celia Cruz, y ayer el director Yerandy Basart Ramos, nos presentó una propuesta cruda en homenaje a la guaracheara del mundo donde “¡Un transformista se va de polizón en un contenedor de bacalao! Solo lleva una peluca y unas gafas, además de la bendición de Celia como inspiración y unas ganas inmensas de vivir libre.” El actor, escritor y director Yesler Cruz, nos desplegó su talento histriónico desde cerca, tanto que literalmente, podía sentir su sudor y lagrimas. La dramaturgia de Ángel de la Guardia fue poética, me gustaría verla de nuevo para poder citar algunas de sus frases.
Carlos Montiel… ¡Cómo ha crecido! En una búsqueda artistica en la cual me siento identificado – encontrando la verdad. Para mí, es mi práctica plástica, para él, se trata de la sinceridad actoral. “Intimo” es un unipersonal escrito y dirigido por él mismo “un encuentro con la música que nos toca el alma a lo largo de cada año vivido, donde la música es el hilo conductor que entrelaza algunas vivencias convertidas en recuerdos, generando un indescriptible ambiente de complicidad y nostalgia con esa banda sonora que cada uno lleva dentro” esta propuesta es reflexiva abriendo las posibilidades al debate en una honda activista social sin confrontación.
“Viva La Impro” no forma parte de las micro obras, ya que se presenta en la Sala CCEbox y es un poco mas larga, pero cierro con ellos porque hicieron honor a su premisa, “un show que te dejará con ganas de más”. El público mencionó la palabra clave “control remoto” y hablaron de sus preocupaciones acerca del consumo de la comida chatarra “Fast Food”, permitiendo al colectivo realizar el ejercicio clásico de improvisación “El Infomercial”, transformando este acto único, en una comedia del absurdo contemporáneo. Pero el ejercicio que me hizo reír hasta no poder fue cuando los actores tenían que repetir la escena idénticamente en periodos de tiempo mas cortos. El reparto actoral, mostró habilidades consistentes con de acentos Españoles, Venezolanos y Cubanos, destacando al actor Juan Bautista quien manejó motocicletas, envejeció, interpretó una niña, hasta brincó y parió como chiva maracucha, denotando la frase coloquial Zuliana “Chiva siempre tira pal’ monte”.
Miami es definitivamente la ciudad para estar, crear y disfrutar. Te invito a visitar Microtheater Miami, tomarte un trago con tus amigos, comerte algo y disfrutar el arte en vivo.